Angela Duckworth, profesora de psicología de la Universidad de Pensilvania reconocida con la distinción C. H. Browne, dedicada al estudio del autocontrol y el grit, visitó recientemente el Center for Healthy Minds para conversar sobre su innovadora investigación.
En la entrevista nos da a conocer cómo el camino para alcanzar metas se basa no solo en el talento o la inteligencia sino más bien en una combinación de pasión y perseverancia. Si le interesa explorar en mayor profundidad de qué se trata el grit, consulte su libro titulado “Grit: El poder de la pasión y la perseverancia.” Angela Duckworth también es fundadora del CharacterLab, una organización sin fines de lucro que tiene como objetivo compartir con maestros y padres estrategias con base científica para el desarrollo del carácter en niños y adolescentes, que incluyen el grit, el autocontrol, la gratitud y otras.
¿Cómo definiría el “grit”?
Cuando hablo del grit, me estoy refiriendo a una combinación de pasión y perseverancia (pasión sostenida y esfuerzo constante) durante períodos muy largos —tal vez décadas o incluso durante toda la vida. Las personas apasionadas y perseverantes no solo trabajan duro y terminan sus proyectos, sino que también se enamoran de lo que hacen y piensan en ello todo el tiempo —se enamoran de un tema determinado durante toda la vida y realmente nunca se aburren con eso. Lo contrario es alguien que se obsesiona con algo el lunes y el jueves pasa a otro tema.
¿Cómo una persona puede saber si tiene grit?
Si una persona quiere tener una noción de su nivel de grit debe reflexionar por un momento en cómo se calificaría a sí misma en relación con las siguientes afirmaciones: “Soy una persona dedicada y trabajadora” o “Termino todo lo que empiezo.” Estos son dos componentes del grit, desde el punto de vista de la perseverancia. Ahora, la persona debe tomarse un tiempo para reflexionar sobre estas afirmaciones: “Me he obsesionado con una determinada idea o proyecto durante un período corto y luego he perdido el interés” o “En ocasiones, las ideas y los proyectos nuevos me distraen y pierdo el rumbo de los proyectos anteriores.” Estas dos afirmaciones son desde el punto de vista de la pasión. (Usted mismo/a puede aplicar la Escala de evaluación del Grit y determinar su nivel.)
¿Cuál es la relación entre talento (como la inteligencia o la capacidad atlética), grit y éxito?
Mi psicólogo favorito también es de Filadelfia (Philadelphia). Su nombre es Will Smith, y es un actor nominado al Oscar y músico galardonado. El motivo por el que lo llamo psicólogo lo podrá entender cuando vea el video que se encuentra abajo y escuche la explicación que brinda sobre su éxito en el campo de la actuación.
Otro científico famoso tiene ideas similares sobre el éxito. Charles Darwin manifestó en una carta que siempre había sospechado que los humanos no diferían mucho en su intelecto, sino solo en su “entusiasmo y tenacidad." Las declaraciones de Charles Darwin y Will Smith, que aluden a que el talento y el grit no son lo mismo, nacen de datos empíricos. Si se mide el coeficiente intelectual o la capacidad atlética, ¿cuál sería su correlación con la Escala de evaluación del Grit? Normalmente es de cero a negativa. La intuición de que los chicos inteligentes con los que crecimos no se convirtieron necesariamente en personas trabajadoras y apasionadas sería coherente con los hallazgos de mi investigación. En otras palabras, el éxito tiene menos que ver con la inteligencia y los puntajes que se obtienen en las evaluaciones y más con el grit, una combinación de pasión y perseverancia.
La importancia del grit en relación con el éxito es que se trata de un esfuerzo acumulativo, cualitativo y cuantitativo que los grandes triunfadores pueden aplicar en su trabajo a lo largo de sus vidas. Esto no quiere decir que el talento no importe, pero es importante destacar que el talento no conduce automáticamente al logro. La habilidad humana es una combinación de talento y esfuerzo. El logro, por otro lado, es una combinación de habilidad y esfuerzo. Entonces, como habitualmente les digo a mis hijas adolescentes, el esfuerzo cuenta por dos.
¿Tienen todas las personas la capacidad de ser apasionadas y perseverantes? ¿Existe una capacidad innata o se puede desarrollar?
Al igual que con todos los rasgos de personalidad, los investigadores han encontrado en estudios de gemelos que existe un componente hereditario en el grit. Dicho esto, todo el mundo tiene la capacidad de desarrollar el grit. En mi investigación, hemos visto que el grit puede cambiar a lo largo de la vida. Por ejemplo, a medida que las personas envejecen, su grit aumenta. Las personas también pueden desarrollar el grit.
Es una buena noticia saber que todos somos capaces de desarrollar el grit. ¿Cómo podría una persona comenzar a desarrollar el grit?
Tengo cuatro recomendaciones. Sinteticé estas recomendaciones basadas en muchas áreas de investigación que no fueron necesariamente realizadas por mí. La primera recomendación es desarrollar la pasión y los intereses. La segunda recomendación es cultivar la práctica intencionada. La práctica experta –o intencionada– es una herramienta concreta que usan las personas con grit para dominar una habilidad o mejorar el rendimiento. El grit predice que una persona usará la práctica intencionada. En otras palabras, las personas con grit se involucran más en la práctica intencionada.
Source: CharacterLab Expert Practice Playbook. You can check out our Playbook called “Expert Practice” for more information about how to learn this and share it with people in your life.
La recomendación final es desarrollar el sentido de que lo que usted hace es significativo. Este es el punto donde lo que usted hace se convierte en la expresión de sus valores e identidad. Cuando la persona llega a este nivel de compromiso debería poder afirmar que no solo le interesa lo que hace, sino que está consciente de que esto beneficia a otras personas y que al mismo tiempo le da sentido a su vida. Una de las correlaciones más sólidas que he encontrado en mis datos se presenta entre el sentido de propósito que usted experimenta en lo que hace y su propia evaluación del grit.
Otra técnica informal que utilizo con mis hijas se llama “Regla de las cosas difíciles.” Desde que tenían cinco años han estado haciendo cosas difíciles elegidas por ellas mismas. El primer requisito es que tiene que involucrar una práctica intencionada, la cual debería incluir objetivos, concentración, retroalimentación y repetición –actividades como correr, practicar ballet o tocar violín califican como “cosas difíciles.” El segundo requisito es que deben completar la actividad, o al menos no renunciar hasta que la actividad llegue a un punto de término natural (digamos, el final del año escolar).
En los últimos años, sin embargo, comencé a llamarle la “Regla de las cosas divertidas.” ¿Por qué? Una de mis hijas estaba muy dedicada a la repostería y cuando le sugerí que esa actividad podría ser su “cosa difícil” respondió: “No, lo difícil no puede ser divertido.” Entonces modifiqué la Regla de las cosas difíciles, ya que para mí es importante alentarlas a que elijan algo que también les resulte divertido. Una parte importante del grit es la pasión, que incluye un componente de diversión y asimilación frente al tema elegido.
“La importancia del grit en relación con el éxito es que se trata de un esfuerzo acumulativo, cualitativo y cuantitativo que los grandes triunfadores pueden aplicar en su trabajo a lo largo de sus vidas”
¿Cuáles son las diferencias y similitudes entre el grit y el autocontrol?
Creo que el autocontrol y el grit son primos hermanos. Definitivamente hay algunas similitudes. La forma que tenemos de pensar en el autocontrol es: cada vez que usted tiene un conflicto entre A y B, donde A es mejor para usted y B no es tan beneficioso, usted se enfrenta a la necesidad de resolver ese conflicto.
Por ejemplo, en un momento dado, es posible que tenga que elegir entre hacer sus impuestos y ver un episodio en Netflix. O puede que en otra ocasión tenga que elegir entre usar hilo dental y no hacerlo. El autocontrol es elegir A sobre B porque a la larga es mejor para uno. La diferencia entre el grit y el autocontrol es que el grit implica una pasión significativa a nivel personal. No es lo mismo que hacer los impuestos o preocuparse de la salud de las encías. Considero que hay cierta superposición entre estos dos aspectos, pero el marco de tiempo y el significado personal de los objetivos diferencian al grit del autocontrol.
- Editado por Brita Larson